Mi nombre es Miguel Ángel MARTÍNEZ, nacido y residente en Sóller y toda esta aventura de las salsas empezó cuando en uno de mis viajes descubrí los diferentes sabores e intensidades de el picante. Estuve observando durante un tiempo la manera que tienen ellos de prepararlo y que ingredientes utilizaban y al volver a casa empecé a investigar como podía hacer las salsas.

Durante aproximadamente 2 años estuve haciendo pruebas en casa para ver que productos podía mezclar entre sí y comprobar cuanto tiempo podrían aguantar mis elaboraciones sin tener que añadir ningún químico, ya que mi idea desde el principio era que fuese un producto lo más natural posible.

Al principio estás elaboraciones eran solo para consumo propio, donde en contadas ocasiones cenando con la familia o amigos, probaron estas salsas y les gustó muchísimo y empezaron a animarme para que las sacara a la venta.

Entonces fue cuando decidí plantar muchas más plantas en nuestro huerto y elaborar más cantidades, siempre respetando la receta inicial.

En un año conseguimos tener nuestro producto comercializándose en muchas tiendas repartidas por todo Baleares y península.

Todas estas salsas están elaboradas a base de guindillas picantes de diferentes tipos de intensidades, juntamente con cierta cantidad de vinagre, sal y una mezcla de especias secretas.

La gran diferencia entre nosotros y los demás fabricantes de picante es que nuestra empresa surgió de una afición propia como amantes del picante y nuestro único objetivo es disfrutar del sabor del picante y no la economía como los demás negocios.